Sorpréndete de los beneficios que tiene este maravilloso alimento natural. Diurético, lleno de vitaminas, minerales, calcio y mucho más!
El origen de la auyama radica en el sur de Norteamérica, en los estados de Puebla, Oaxaca y el Estado de México. Se cultivó mucho antes, en épocas prehispánicas en prácticamente toda Mesoamérica, en la trilogía milpera, junto con el maíz y el frijol.
Calabaza, zapallo o auyama, igual todos la conocen. Media taza de este alimento proporciona los requerimientos diarios de betacarotenos, sustancias antioxidantes de pigmento rojo, naranja y amarillo, que proveen vitamina A y previenen el envejecimiento celular.
Aporta entre 13 a 30 calorías por cada 100 gramos -según la variedad, contiene vitamina A, C, vitaminas del grupo B, ácido fólico, y minerales como calcio, magnesio, fósforo y hierro.
Es diurética, desintoxicante, regula los niveles de los niveles de azúcar en la sangre y además es un aliado al momento de disminuir peso o mantener la figura. Es rico en fibras que ayudan a combatir el estreñimiento, contiene también betacaroteno, esencial para la belleza de la piel, las mucosas, la salud de la visión, además de prevenir el cáncer por sus propiedades antioxidantes. Las enzimas que contienen ayudan a exfoliar muy suavemente la piel -adiós a la piel seca y escamosa!
Muchas dietas recomiendan la auyama como una hortaliza que puede sustituir los cereales y tubérculos con alto contenido en almidón.
Diurética y laxante
Contiene muy pocas grasas e hidratos de carbono (5,4 gr. cada 100 gr.). Su alto contenido en potasio (entre 140 y 360 mg), así como su pobreza en sodio, hacen de la auyama la reina del poder diurético.
La auyama se recomienda ser consumida por personas que tienen estómago e intestino delicados pues actúa como suavizante y ayuda a desintoxicar el organismo de residuos tóxicos. Es ligeramente laxante gracias a la fibra dietética que contiene, lo que también colabora en la restitución del peso ideal, pues al normalizarse las funciones de eliminación también se incrementa la velocidad de metabolización de grasas y otros productos de desecho. Su pulpa, rica en mucílagos, ejerce una acción emoliente (suavizante) y protectora de la mucosa del estómago, lo que la hace apropiada en quienes sufran de acidez estomacal, mala digestión, gastritis o úlcera.
Receta para un cutis radiante
Mezcla dos cucharadas de puré de auyama (fresca), 1/4 de cucharadita de leche orgánica (bio), 1/2 cucharada de miel. Aplica esta mezcla sobre tu rostro (limpio) y durante15 minutos: Luego enjuaga e hidrata.
Aparato respiratorio
Es una gran aliada a la hora de prevenir las infecciones del aparato respiratorio- también elimina las mucosidades en los pulmones y la garganta-y de fortalecer nuestro sistema inmunológico, pues ayuda a la formación de anticuerpos y a la producción de glóbulos rojos y blancos
Lo bueno de las mascarillas caseras es que te ayudan naturalmente y no necesitas invertir dinero en cosméticos costosos. Se debe tener cuidado con la piel seca porque tiende a arrugarse. Prepara una mascarilla natural con huevo y miel y verás que pronto mejora tu piel. Además no te olvides de tomar mucha agua!
Por qué el huevo? Veamos, la yema del huevo es rica en lecitina, esta suaviza el cutis. Contiene también minerales: fósforos, selenio y cinc, y las vitaminas A, D, B12, ácido fólico y biotina, ideales para tratar la piel seca. La clara contiene proteínas que minimizan el tamaño de los poros y permite un levantamiento temporal del rostro. El cabello también puede beneficiarse del huevo, le da un brillo natural y suavidad a su textura. Benefíciate de las ventajas del huevo!
